El
uso de las tecnologías de la información y la comunicación (Tic) en los
diferentes niveles y sistemas educativos tienen un impacto significativo en el
desarrollo del aprendizaje de los estudiantes y en el fortalecimiento de sus
competencias para la vida y el trabajo que favorecerán su inserción en la
sociedad del conocimiento.
Vivimos
en una sociedad que está inmersa en el desarrollo tecnológico, donde el avance
de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) han cambiado
nuestra forma de vida, impactando en muchas áreas del conocimiento. En el área
educativa, las TIC han demostrado que pueden ser de gran apoyo tanto para los
docentes, como para los estudiantes.
La
implementación de la tecnología en la educación puede verse sólo como una
herramienta de apoyo, no viene a sustituir al maestro, sino pretende ayudarlo
para que el estudiante tenga más elementos (visuales y auditivos) para
enriquecer el proceso de enseñanza aprendizaje.
Ahora
ya no es suficiente adquirir un conocimiento o dominar una técnica sino es
necesario que el alumno sea capaz cognitivamente y sobre todo, en las otras
capacidades: motrices, de equilibrio, de autonomía personal y de inserción
social.
La
competencia implica el uso de conocimientos, habilidades y actitudes y deben
contribuir al desarrollo de la personalidad en todos los ámbitos de la vida.
El
aprendizaje de una competencia está muy alejado de un aprendizaje mecánico,
permite comprender la complejidad de los procesos de aprendizaje, enseñar
competencias implica utilizar formas de enseñanza consistentes en dar respuesta
a situaciones de la vida real.